No sólo azúcar: Curso con Paula Machín de Cream Bakery

El verano pasado simplemente sentí la necesidad de escaparme a Madrid a hacer mi primer curso de repostería, así que busqué uno al azar que encajase en la agenda y que no fuera disparatadamente caro.

Lo cierto es que lo que más disfruté en mi periplo fueron los paseos hacia ninguna parte por las calles madrileñas y las comidas de plato único leyendo o buscando en internet locales interesantes de tartas y cupcakes. Y aquí es cuando conocí a Paula en Cream Bakery, que muy amablemente me regaló un rato de conversación, la cual avaló lo que había leído sobre ella el día anterior en El rincón de Bea y que a su vez me trajo a la mente lo que mucho antes había leído en El elemento de Ken Robinson.

Una de las cosas que me contó fue que empezaría a dar cursos los lunes y cómo se los planteaba y yo pensé:

Y cual fue mi sorpresa cuando la semana pasada me encuentro en facebook un anuncio de plazas libres en el curso que Paula impartiría en Aliter Dulcia en Gijón a dos días de celebrarse. ¡Allá vamos Lore!

Paula en plena explicación. Tartas cubiertas con ganache. Flores secando.

Y el curso no defraudó. Son de estas cosas que yo considero han merecido la pena. Por fin he aprendido algún valiosísimo truco-técnica que creo que va a conseguir ahorrarme tiempo en el montaje de las tartas antes de la decoración quedando así de perfectas.

Por otro lado, esta mujer tiene la capacidad de ser muy cercana y normal al trato (cosa que mi sistema nervioso agradece infinitamente), de ser muy concisa explicando y responder absolutamente todas las cuestiones que se le plantean, de supervisar el trabajo de todas las alumnas y acudir rápidamente cuando la catástrofe es inminente, de manejar la espátula y los alisadores con maestría...En definitiva, es una gran profesional.

¡Mirad que cara de alegría con mi trabajo!

La tarta estaba deliciosa. Y jugosa ;)

Y ya sólo me queda dar las gracias a la profe (me ha encantado el curso, de verdad; lo digo por si no lo habíais notado), a Isabel por la iniciativa de traerlo a su local y a mis compañeras que fueron muy majas.